lunes, 9 de mayo de 2022

 


Bululú / bojiganga


Solución de wordle

Solución a los wordle 36 y 37 del 8 de mayo.


Ayer hablábamos de los improvisadores en torno a la canción y la poesía. El teatro también ha usado históricamente este recurso. Actualmente hay compañías de improvisación que responden a la demanda del público y ejecutan escenas en el acto con su petición.

En tiempos pretéritos la interacción del público con los comediantes era mayor que en la actualidad, en que nos sentamos en el teatro con respeto y aceptación acrítica de lo que se nos está ofreciendo. En el gran momento del teatro, con su renacer como espectáculo a finales de la Edad Media, y sobre todo en el Renacimiento y el Barroco, aunque había obras de texto que el público debía observar y respetar, siempre quedaban entremeses, prólogos y escenas en las que el cómico tenía mayor libertad de interacción, dando al vulgo lo que este solicitaba.

Las compañías pequeñas, de escenario improvisado en la plaza del pueblo, probablemente eran las que más capacidad tenían para ese diálogo con el público. Agustín de Rojas Villandrando, en "El Viaje Entretenido" a principios del siglo XVII, nos informa de los nueve tipos de compañías que hay en un texto reproducido hasta la saciedad: 

"Habéis de saber que hay bululú, ñaque, gangarilla, cambaleo, garnacha, bojiganga, farándula y compañía".

Y a continuación desgrana el significado de algunas: 

"El bululú es un representante solo, que camina a pie y pasa su camino, y entra en el pueblo, habla al cura y dícele que sabe una comedia y alguna loa: que junte al barbero y sacristán y se la dirá porque le den alguna cosa para pasar adelante. Júntanse éstos y él súbese sobre un arca y va diciendo: "agora sale la dama", y dice esto y esto; y va representando, y el cura pidiendo limosna en un sombrero, y junta cuatro o cinco cuartos, algún pedazo de pan y escudilla de caldo que le da el cura, y con esto sigue su estrella y prosigue su camino hasta que halla remedio".

Para quien haya visto obras interpretadas por el actor andaluz Rafael Álvarez, "El Brujo", reconocerá en él al moderno bululú, y habrá visto que la improvisación es un elemento esencial de sus interpretaciones, aunque al fondo haya siempre un texto. La interacción con el público varía en función de lo propiciatorio que sea el escenario.

Elevándose en complejidad los diversos tipos de compañía, llegamos a la bojiganga (también en el diccionario mojiganga, quizá más conocida):

"En la bojiganga, van dos mujeres y un muchacho, seis o siete compañeros, y aun suelen ganar muy buenos disgustos, porque nunca falta un hombre necio, un bravo, un mal sufrido, un porfiado, un tierno, un celoso ni un enamorado: y habiendo cualquiera de éstos, no pueden andar seguros, vivir contentos, ni aun tener muchos ducados. Éstos traen seis comedias, tres o cuatro autos, cinco entremeses, dos arcas, una con hato de la comedia y otra de las mujeres. [...] Suelen traer, entre siete, dos capas, y éstas van entrando de dos en dos, como frailes. Y sucede muchas veces, llevándosela el mozo, dejarlos a todos en cuerpo. Éstos comen bien, duermen todos en cuatro camas, representan de noche, y las fiestas de día, cenan las más veces ensalada, porque como acaban tarde la comedia, hallan siempre la cena fría. Son grandes hombres de dormir de camino debajo de las chimeneas, por si acaso están entapizadas de morcillas [...] Este género de bojiganga es peligrosa, porque hay entre ellos más mudanzas que en la luna y más peligros que en la frontera (y esto es si no tienen cabeza que los rija)".

Un buen ejemplo de bojiganga lo tenemos en el enfrentamiento que tiene Don Quijote en el capítulo XI con la carreta de cómicos que representaba el Auto Sacramental "Las Cortes de la Muerte". Sin tiempo para cambiarse, iban de pueblo a pueblo vestidos como figuras alegóricas, y Don Quijote toma por veras lo que era una simple bojiganga:

Carretero, cochero o diablo, o lo que eres, no tardes en decirme quién eres, a dó vas y quién es la gente que llevas en tu carricoche, que más parece la barca de Carón que carreta de las que se usan.

Y más adelante:

Estando en estas pláticas, quiso la suerte que llegase uno de la compañía que venía vestido de bojiganga, con muchos cascabeles, y en la punta de un palo traía tres vejigas de vaca hinchadas; el cual moharracho, llegándose a don Quijote, comenzó a esgrimir el palo y a sacudir el suelo con las vejigas y a dar grandes saltos, sonando los cascabeles;


La palabra bojiganga parece que está relacionada con vejiga, siendo su origen. Llevaban siempre un personaje disparatado, el de esta escena, que se llamaba, según las zonas, moharracho, mojarrilla o botarga, palabras todas ellas muy jugosas para el scrabble.

Del resto de compañías me detendré por razones personales en la Gangarilla, 

"compañía más gruesa [que el ñaque]; ya van aquí tres o cuatro hombres, uno que sabe tocar una locura; llevan un muchacho que hace la dama, hacen el auto de "La oveja perdida", tienen barba y cabellera, buscan saya y toca prestada (y algunas veces se olvidan de volverla), hacen dos entremeses de bobo, cobran a cuarto, pedazo de pan, huevo y sardina y todo género de zarandaja (que se echa en una talega); éstos comen asado, duermen en el suelo, beben su trago de vino, caminan a menudo, representan en cualquier cortijo y traen siempre los brazos cruzados porque jamás cae capa sobre sus hombros".

En el mundo de la animación a la lectura infantil, durante mucho tiempo atrás estuvo trabajando Luisa López, con el nombre precisamente de "Gangarilla". Aunque sus animaciones siempre estaban guionizadas, con uno o varios libros infantiles como eje de la historia, la improvisación estaba siempre presente en sus trabajos, ineludible al interactuar constantemente con niños y jóvenes. Ahora Luisa sigue improvisando jugadas, con la fotografía y las fichas del scrabble :-)

Todos estos tipos de compañías citadas se agrupan bajo el genérico "Cómicos de la Legua", llamados así porque tenían que acampar, en teoría, a una legua de las poblaciones. En Italia tuvieron su correlato con la Comedia del Arte, y su epígono, Darío Fo, obtuvo con el premio nobel de literatura en 1997 el reconocimiento que todas estas gentes merecían.

Surcaron el tiempo y sobrevivieron en España hasta poco después de la Guerra Civil, cuando desaparecieron ante el cine, la televisión, y otros entretenimientos; y especialmente porque las condiciones de vida de los actores ya no eran las admisibles en esos tiempos. Fernando Fernán Gómez filma y firma de manera magnífica el acta de defunción de este género de teatro en su película "El viaje a ninguna parte". Mítica la escena de "me cago en el padre de los hermanos Lumiere", pocas veces algo me ha hecho reír y llorar a la vez.

https://www.youtube.com/watch?v=KPfN2TwoRng

No hay comentarios:

Publicar un comentario

  Problema de Wordle. Wordle escrablístico 27 de julio 2022 Dos nuevas: 150 Wordle Orden del Azar 151 Wordle Orden del Azar